El sector de la automoción, estratégico en la economía vasca

La industria de la automoción y el País Vasco forman un destacado binomio que caminan juntos desde hace años. Su gran desarrollo permite encontrar aquí un amplio catálogo de empresas (casi trescientas) relacionadas con el sector de la industria automotriz que fabrican un tercio del total de los componentes del Estado, y dos grandes fabricantes: Mercedes Benz en Vitoria-Gasteiz y el Grupo Irizar con sede en Ormaiztegi, Gipuzkoa. Esta gran concentración en un pequeño territorio como el del País Vasco solo es comparable a la de algunos länders alemanes,  o estados federados alemanes.

El sector se ha convertido en uno de los estratégicos de la economía vasca, junto a la energía y la aeronáutica. Ha contribuido, unido al acero, a mantener el importante peso de la industria en el PIB de la Comunidad Autónoma Vasca: el 24% en 2013 (no incluye los datos de la factoría de Mercedes en Vitoria-Gasteiz).

En 2013, el segmento del automóvil facturó en el País Vasco 13.071 millones, un 5,2% más que en 2012, cuando alcanzó los 12.400 millones de euros, y 2.000 más que antes de la crisis. Cifras que le han llevado a convertirse en uno de los principales motores de la economía vasca.

Los datos de los últimos años sitúan el peso de la industria vasca de la automoción en un 17% del PIB del País Vasco, el 20% si se suman los datos de Mercedes Benz Vitoria-Gasteiz. Y es que el 90% de la facturación automovilística del País Vasco se exporta, lo que contribuye al superávit comercial vasco, más de la mitad se produce fuera de Europa, y da empleo en los Territorios Históricos Vascos de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba a casi 35.000 personas.

Claves del sector

La buena salud del sector vasco de la automoción se debe a la mejora de las perspectivas económicas internacionales, el crecimiento de la venta de vehículos en el País Vasco (en 2014 el incremento de las matriculaciones se situó en el 18,4%), la buena marcha del sector a nivel mundial y la recuperación del mercado europeo.

Pero junto a los factores externos, hay que añadir elementos propios, señas de identidad del segmento automovilístico vasco que explican su papel preponderante en todo el mundo.

• Con un gran nivel de eficacia y eficiencia, además de disponer de una importante cadena de valor: aceristas, matriceros, mecanizadores, fabricantes de bienes de equipo, productores de máquina-herramienta, ingenierías, consultorías, universidades, centros de investigación… También abarca funciones de fabricación de elementos del drivetrain, powertrain, elementos estructurales y carrocería, exteriores, electrónica y llantas. Esto hace que el sector vasco tenga presencia en todas las funciones del vehículo, fabricando una gama amplia de productos en cualquier material y en cualquier proceso.

 Junto a ellos dos grandes fabricantes: Mercedes Benz en Vitoria-Gasteiz, del grupo alemán Daimler, que en sus años de bonanza supera las 100.000 unidades, emplea a 3.500 personas y supone el 7,4% del total de las exportaciones del País Vasco. Daimler invertirá 500 millones para sus nuevos modelos de furgoneta, de los que casi 200 irán a la planta de Vitoria-Gasteiz, con lo que asegura actividad en la empresa alavesa para los próximos quince años.

Y el Grupo Irizar, referente mundial en la fabricación de autobuses y autocares de alta gama. Con 125 años de trayectoria, cuenta con más de 3.500 personas en sus factorías, implantaciones productivas en el País Vasco,  España, México, Brasil, Marruecos, Sudáfrica e India. En 2013 logró un récord de facturación de 556 millones de euros, con una producción de 5.368 autocares, de los que 2.988 fueron de alta gama. Una de las claves del Grupo Irizar es su internacionalización, ya que casi la mitad de la facturación, el 48%, proviene de las plantas exteriores.

• Internacionalización. El sector vasco de la automoción es uno de los sectores más internacionalizados del tejido industrial vasco. Cuenta con más de dos centenares de plantas productivas en 29 países, sobre todo en mercados emergentes de Rusia, India y China, a los que se les ofrece piezas y componentes. Casi 40.000 personas trabajan para las factorías vascas en el exterior. El País Vasco cuenta con más de una treintena de multinacionales del sector.

• Innovación. I+D+I. Un rasgo distinto de las empresas vascas del motor es su apuesta por la innovación y la investigación. Invierten en I+D+i una media del 3,6% de su facturación, con más de 3.000 personas dedicadas a esta labor. Llega incluso al 4,7% en grandes grupos empresariales y filiales multinacionales. Además, la colaboración de las instituciones públicas para mejorar el sector de la automoción en el País Vasco ha sido también importante con la creación del centro de investigación cooperativa pionero en Europa Automotive Intelligence Center (AIC) en Boroa-Amorebieta (Bizkaia), puntero en Europa, y una de las grandes bazas para asegurar el crecimiento del sector en los próximos años.

• Formación. Un aspecto relevante para contar con personas formadas y competitivas que aporten valor y conocimiento. De ahí los Programas de Becas Internacional Approach junto a la Diputación Foral de Bizkaia (BFA) y el AIC para formar futuros profesionales del sector, el Convenio Marco de Colaboración entre AIC y la Universidad pública Vasca, UPV-EHU o el acuerdo entre AIC y la Universidad de Deusto para impartir un Diploma de Especialización en Ingeniería de Automoción.

Estos factores han hecho que el País Vasco sea un referente a nivel estatal, europeo y mundial dentro de la industria automovilística. Un modelo reconocido por el diario alemán Süddeutsche Zeitung que elaboró hace tres años una serie de reportajes sobre el sector vasco de automoción. En ellos ensalzaba su carácter innovador, el peso significativo de la industria de componentes, su gran capacidad para asentarse en los mercados emergentes y su especialización como ventaja competitiva, similar a lo que sucede en Renania del Norte-Westfalia.

Clúster vasco de la Automoción

La Agrupación Clúster de Industrias de Componentes de Automoción de Euskadi (ACICAE) ha tenido un papel clave en la relevancia estatal e internacional que ha adquirido el sector vasco del automóvil y las industrias auxiliares. Surgido en 1993 con el apoyo del Gobierno Vasco, fue una de las primeras asociaciones clústeres formados en Europa.

El Clúster de Automoción del País Vasco es una asociación sin ánimo de lucro que nació para mejorar la competitividad de la automoción en el País Vasco. En sus dos décadas de trayectoria ha crecido de manera rápida, pasando de las iniciales doce empresas a más de 150 socios en la actualidad. Casi la mitad de ellas están situadas en Bizkaia.

                                                                                                                                                                        Fuente: La Caixa

Sobre ACICAE ha pivotado el gran crecimiento que ha tenido en los últimos años el sector vasco de la automoción y la importancia que ha adquirido. Su contribución ha sido fundamental para multiplicar por cuatro su facturación en los últimos quince años y ser uno de los apartados que más tira actualmente de la economía vasca.

Los nuevos retos a los que se enfrenta el sector de la automoción internacional, incluido el vasco, son la globalización, los cambios tecnológicos, los mercados emergentes, costes, proveedores, recursos humanos o la gestión del medio ambiente.

Optimismo para el futuro

Frente a los grandes desafíos, el segmento automovilístico en el País Vasco está fuertemente consolidado y con la vista puesta en la competitividad e innovación que hacen que pueda ver el futuro con optimismo. En los próximos cinco años se prevé un crecimiento del sector a nivel mundial de casi el 20%.

Así, las perspectivas para 2015 son positivas para un sector en alza, estratégico dentro de la economía vasca, apoyado en una mejora de las cifras económicas.

Previsiones que apoya el estudio Principales rasgos económicos de 2014 y perspectivas 2015 de Confebask. Para la patronal vasca, el sector exterior del País Vasco aumentará ligeramente su contribución al crecimiento al subir las exportaciones.